jueves, 20 de octubre de 2011

EL ESPÍRITU OLÍMPICO

     El espíritu olímpico debe orientarse a revalorizar el deporte como valor en sí. El deporte exige la competición como su elemento vital de superación. La superación personal en el esfuerzo por conseguir una meta representa lo mejor del legado olímpico.

      Lo más importante del influjo del espíritu olímpico sobre la sociedad debe ser la difusión de la bondad del deporte como forma de desarrollo de un buen paquete de virtudes humanas. Inculcar ese espíritu en la sociedad está mucho más relacionado con la idea de participación que de la de victoria. 


                                                             

     La noción del espíritu olímpico corre pareja en los últimos años al juego limpio. La plaga del doping en el deporte profesional por los enormes intereses que se ponen en juego ha contagiado el deporte olímpico cuando éste ha optado por el espectáculo y el negocio.

     El deporte no es un fin en la vida sino un medio para favorecer el bienestar de la persona en la dura tarea de realizar sus objetivos.


Matemáticas 5º TEMA 2

La multiplicación. PROPIEDAD CONMUTATIVA



Propiedad distributiva



OPERACIONES COMBINADAS

miércoles, 5 de octubre de 2011

Educación Física

DEPORTE PARA UN CEREBRO MÁS SANO. Programa "REDES" Eduard Punset




     Médicos, investigadores, medios de comunicación… en boca de todos se oyen los beneficios del deporte y el ejercicio regular para conservar el cuerpo en forma, prevenir enfermedades cardiovasculares y sentirse mejor anímicamente. Lo que no suelen añadir es que el ejercicio es también un escudo de protección de nuestro cerebro y un estimulador del aprendizaje y la memoria. Así lo han demostrado neurocientíficos como Fernando Gómez-Pinilla, que nos cuenta cómo se benefician nuestras neuronas de la actividad de los músculos.

jueves, 8 de septiembre de 2011

DECÁLOGO DEL BUEN DEPORTISTA

1. Se es Buen Deportista dentro y fuera del campo de juego.

2. Para ser un Buen Deportista hacen falta reflejos, agilidad, aguantar el cansancio, entrenarse y no perder el ánimo cuando se va perdiendo.

3. El Buen Deportista es valiente. Hace lo que le parece bueno aunque le exija esfuerzo.

4. No se puede jugar si no se respetan las reglas del juego. El Buen Deportista las respeta y las hace respetar.

5. El Buen Deportista no hace trampas ni dentro ni fuera del terreno de juego.

6. El Buen Deportista, cuando juega en equipo, no pretende lucirse por su cuenta. Sabe que quien tiene que ganar es el equipo. Ayuda y acepta la ayuda de los compañeros.

7. El Buen Deportista intenta ganar a los demás, pero sobre todo intenta ganarse a sí mismo, procurando jugar mañana mejor de lo que juega hoy.

8. El Buen Deportista sabe que para jugar bien hay que jugar con inteligencia y que el entrenamiento es el medio para conseguirlo.

9. El Buen Deportista está orgulloso de serlo.

10. El Buen Deportista busca, sobre todo, ser mejor persona.